Pdvsa intensifica hostigamiento contra empleados no chavistas
04-Mar 06:55 amAndrés Rojas Jiménez
La empresa estatal recurre a jubilaciones anticipadas.Se habla de la filial invisible Flotaven, adonde se envía el personal que no acude a las marchas del PSUV
Pdvsa | Reuters
"Me obligan a ir a las marchas y pasan control de quién va y quién no. Un día dije: No voy más, y desde ese momento no me asignan trabajos, no me toman en cuenta para los ascensos. Sólo cumplo horario", relata una profesional que labora en Petróleos de Venezuela. "Me pusieron una persona por encima sin la formación que tengo porque pasé un memorándum que advertía que no estaban los soportes de una compra", señala un contador de la empresa estatal.
"Me trasladaron para Flotaven porque hubo actos políticos a los que no fui, pero aún así me dicen que debo ir a las marchas a favor del presidente Chávez si quiero limpiar mi nombre", dijo un analista de la estatal.
El anonimato de estos testimonios tiene una razón: el temor a retaliaciones por parte de autoridades de Pdvsa. El único caso que se hizo público fue el de la periodista Egilda Gómez, que hasta la semana pasada laboró en el área de Asuntos Públicos de Pdvsa, y se hizo notorio después de que su esposo, el también periodista Vladimir Villegas, lo tratara en su columna de El Nacional el martes pasado.
"Me habían asignado en comisión de servicio a La Electricidad de Caracas. Cuando terminé mi trabajo en febrero del año pasado regresé a La Campiña y tardaron dos meses en decirme cuál sería mi nueva asignación. Me mandaron para Invetep en Los Teques, aun cuando mi contrato decía que yo debía trabajar en Caracas", relata Gómez. "Después de un reposo solicité mi regreso a La Campiña y me dijeron que mi caso no procedía (...) el pasado 24 de febrero un analista me llamó para decirme: Tengo que hablar una cosita contigo (...).
Me quitaron el carnet y después de que salió la columna de Vladimir me despidieron".
Gómez, al igual que Villegas, asume que las posiciones de su esposo contra el Gobierno detonaron la presunta modalidad de acoso laboral que denunció.
Exacerbar una práctica. En Pdvsa se habla de Flotaven como la filial invisible. Aseguran que no se ve pero se siente.
Gómez, al igual que muchos otros trabajadores, estuvo en ella. Tiene su antecedente en los procesos de reestructuración hechos por la corporación hace 15 años cuando se fusionaron las antiguas filiales Maraven, Corpoven y Lagoven, "La anticipación de la jubilación es otra forma que legalmente se ha utilizado en Pdvsa para sacar a las personas que no son confiables para el lo que ocasionó la unificación de departamentos y la necesidad de reducir personal.
"Se empezó a hablar de Flotaven porque hubo personas que quedaron flotando dentro de la estructura de Pdvsa cuando desaparecieron las filiales", explica José Bodas, secretario general de la Federación Unitaria de Trabajadores del Petróleo de Venezuela. "En la actualidad a Flotaven van a parar aquellos empleados que no están amparados en la convención colectiva, que no van a marchas del PSUV, no se ponen la franela roja ni asisten a los actos masivos del presidente Hugo Chávez o sencillamente se sospecha que simpatizan con la oposición", agrega.
Las denuncias no se formalizan ante el Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales porque las represalias son mayores: anticipo de la renuncia, demora en el pago de prestaciones sociales o del dinero acumulado en la caja de ahorros y exclusión del plan de pensiones.
proceso revolucionario aun cuando no hayan alcanzado la edad de retiro o tengan la calificación mayor para continuar en el cargo", dijo Eddie Ramírez, coordinador de la organización Gente del Petróleo.
"Conocemos de profesionales que están aguantando todas las arbitrariedades porque están próximos a jubilarse y no quieren perder ese beneficio", señala.
Un tema para Aporrea. El portal de Internet Aporrea, vinculado con el Gobierno, recogió hace cinco años la denuncia del Frente de Factores Revolucionarios Petroleros, en la cual se señala que en Pdvsa se habla del mobbing, término en inglés que industriólogos o relacionistas industriales utilizan para referirse a lo que se entiende como acoso laboral, y también se refiere a la filial invisible.
"Esta espiral determina que el involucrado tenga pánico del contexto laboral, que busque soluciones fuera de su organización, que renuncie a su posición laboral o se retire prematuramente, que acepte una jubilación en condiciones desfavorables, que se mantenga en la organización vegetando (Flotaven) u ocupando posiciones no acorde con su formación académica, y lo que es más grave percibir un salario que no justifica su presencia en la corporación".
Esta organización señala que el mobbing en Pdvsa se aplica por etapas. En la primera comienza el acoso psicológico, en la segunda se exacerba el conflicto entre gerente de área y empleado, en la tercera se oficializa ante la Gerencia de Prevención y Control de Pérdidas (el área de seguridad de Pdvsa) sobre el riesgo de que ese empleado tenga acceso a dependencias clave.
Indica que el hostigamiento no termina hasta que se concreta la renuncia o jubilación anticipada. Sólo se recurre al despido cuando las formas de acoso no cumplen el objetivo último de propiciar el retiro voluntario.
"Me trasladaron para Flotaven porque hubo actos políticos a los que no fui, pero aún así me dicen que debo ir a las marchas a favor del presidente Chávez si quiero limpiar mi nombre", dijo un analista de la estatal.
El anonimato de estos testimonios tiene una razón: el temor a retaliaciones por parte de autoridades de Pdvsa. El único caso que se hizo público fue el de la periodista Egilda Gómez, que hasta la semana pasada laboró en el área de Asuntos Públicos de Pdvsa, y se hizo notorio después de que su esposo, el también periodista Vladimir Villegas, lo tratara en su columna de El Nacional el martes pasado.
"Me habían asignado en comisión de servicio a La Electricidad de Caracas. Cuando terminé mi trabajo en febrero del año pasado regresé a La Campiña y tardaron dos meses en decirme cuál sería mi nueva asignación. Me mandaron para Invetep en Los Teques, aun cuando mi contrato decía que yo debía trabajar en Caracas", relata Gómez. "Después de un reposo solicité mi regreso a La Campiña y me dijeron que mi caso no procedía (...) el pasado 24 de febrero un analista me llamó para decirme: Tengo que hablar una cosita contigo (...).
Me quitaron el carnet y después de que salió la columna de Vladimir me despidieron".
Gómez, al igual que Villegas, asume que las posiciones de su esposo contra el Gobierno detonaron la presunta modalidad de acoso laboral que denunció.
Exacerbar una práctica. En Pdvsa se habla de Flotaven como la filial invisible. Aseguran que no se ve pero se siente.
Gómez, al igual que muchos otros trabajadores, estuvo en ella. Tiene su antecedente en los procesos de reestructuración hechos por la corporación hace 15 años cuando se fusionaron las antiguas filiales Maraven, Corpoven y Lagoven, "La anticipación de la jubilación es otra forma que legalmente se ha utilizado en Pdvsa para sacar a las personas que no son confiables para el lo que ocasionó la unificación de departamentos y la necesidad de reducir personal.
"Se empezó a hablar de Flotaven porque hubo personas que quedaron flotando dentro de la estructura de Pdvsa cuando desaparecieron las filiales", explica José Bodas, secretario general de la Federación Unitaria de Trabajadores del Petróleo de Venezuela. "En la actualidad a Flotaven van a parar aquellos empleados que no están amparados en la convención colectiva, que no van a marchas del PSUV, no se ponen la franela roja ni asisten a los actos masivos del presidente Hugo Chávez o sencillamente se sospecha que simpatizan con la oposición", agrega.
Las denuncias no se formalizan ante el Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales porque las represalias son mayores: anticipo de la renuncia, demora en el pago de prestaciones sociales o del dinero acumulado en la caja de ahorros y exclusión del plan de pensiones.
proceso revolucionario aun cuando no hayan alcanzado la edad de retiro o tengan la calificación mayor para continuar en el cargo", dijo Eddie Ramírez, coordinador de la organización Gente del Petróleo.
"Conocemos de profesionales que están aguantando todas las arbitrariedades porque están próximos a jubilarse y no quieren perder ese beneficio", señala.
Un tema para Aporrea. El portal de Internet Aporrea, vinculado con el Gobierno, recogió hace cinco años la denuncia del Frente de Factores Revolucionarios Petroleros, en la cual se señala que en Pdvsa se habla del mobbing, término en inglés que industriólogos o relacionistas industriales utilizan para referirse a lo que se entiende como acoso laboral, y también se refiere a la filial invisible.
"Esta espiral determina que el involucrado tenga pánico del contexto laboral, que busque soluciones fuera de su organización, que renuncie a su posición laboral o se retire prematuramente, que acepte una jubilación en condiciones desfavorables, que se mantenga en la organización vegetando (Flotaven) u ocupando posiciones no acorde con su formación académica, y lo que es más grave percibir un salario que no justifica su presencia en la corporación".
Esta organización señala que el mobbing en Pdvsa se aplica por etapas. En la primera comienza el acoso psicológico, en la segunda se exacerba el conflicto entre gerente de área y empleado, en la tercera se oficializa ante la Gerencia de Prevención y Control de Pérdidas (el área de seguridad de Pdvsa) sobre el riesgo de que ese empleado tenga acceso a dependencias clave.
Indica que el hostigamiento no termina hasta que se concreta la renuncia o jubilación anticipada. Sólo se recurre al despido cuando las formas de acoso no cumplen el objetivo último de propiciar el retiro voluntario.
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